Así es. La vida de un universitario se resumen en dos cosas: Exámenes finales y VACACIONES.
Una de las sensaciones más gratificantes que me han ocurrido en estas semanas, es el hecho de haber conseguido terminar un semestre más de la carrera. Quizás para muchos no sea algo sobresaliente, pero si tomamos en cuenta que cuando entre a la universidad la generación eran de cerca de 1500 alumnos, a la mitad de la carrera ya somos por mucho 750.
La presión para muchos es superior a su deseo de continuar y terminar una carrera. Si bien es cierto, la idea de salir de la universidad y enfrentarte a un mundo en donde los trabajos escasean, al igual que los salarios sean bajos, no ayuda a motivarte en continuar quemándote las pestañas durante cinco semestres más. Sin embargo es más bien un reto para ti mismo el poder ser uno de aquellos miles que terminaron con satisfacción sus estudios.
Cuando se acercan los exámenes finales, entregas de proyectos y demás cosas que uno hace al final de cada año o semestre, una especie de poder sobrehumano se apodera de ti, al igual que su ente malvada, la desesperación.
La ansiedad que uno siente al ver tan próximas las vacaciones, es un aliento fresco de libertad que en muchas ocasiones juega en nuestra contra. Tal es el deseo por tener tardes libres, noches que utilicemos para lo que son, dormir, así como fines de semana divertidos y fuera de cuatro paredes, que generalmente perdemos el rumbo del barco.
El secreto de todo esto, es tratar de mentalizarnos que es el último empujón. Dejaremos de ver a ese fastidioso profesor que hizo de nuestras mañanas las más oscuras de nuestra existencia, al igual que podremos dejar de sonreír hipócritamente a alguno de nuestros compañeros que por cortesía saludamos y un sinfín de cosas más.
Recordemos que en algún momento todos podremos volver a las universidades, compartiendo los conocimientos que nuestra vida laboral nos dio y que las clases nunca consiguieron. Al igual que hacer sufrir a nuevas generaciones, como muchos profesores durante cinco años lograron con nosotros.
Disfruten, cada vez que terminas un ciclo escolar o un nivel de estudios, estarás más próximo a la venganza, la dulce y exquisita venganza.
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